¿Qué nos dijo el cine sobre la inteligencia artificial y las relaciones sexo afectivas?

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La inteligencia artificial es un tema que se encuentra entre los tópicos más frecuentes en las últimas semanas. Las conversaciones con el Chat GPT-4, el llamado de atención de Elon Musk vía Twitter y las imágenes humanas diseñadas digitalmente circularon a toda velocidad en redes sociales. Si bien todo es asombro en cuanto a estas nuevas tecnologías, también hay una cuota de miedo que gira alrededor de la incertidumbre, de todo aquello que no sabemos sobre las IA.

Quizás las preguntas más evidentes sean respecto al trabajo, si los humanos nos convertiremos en prescindibles para los puestos que ocupamos hoy en día y si eventualmente tendremos que competir con computadoras por ofertas laborales. También las dudas pueden rondar sobre la potencial amenaza que representan a la vida humana, entre risas y chistes se desliza la preocupación por vernos enfrentados a algo que ya no podamos controlar y que tenga misiones apocalípticas como destruir la civilización. 

Sin embargo, cuando pensamos en las formas de convivencia de las nuevas tecnologías y la vida cotidiana no es necesario pensar tan a futuro. En el mes de marzo, una empresa china llamada Siweifushe presentó un dispositivo para poder besar a distancia. El prototipo MUA consta únicamente de una aplicación para celulares y unos labios de silicona que se colocan en el mismo. El objetivo es que el usuario pueda sentir los movimientos, la temperatura y el sonido de los “besos” que emite otra persona desde otro lugar. La idea surge a partir del distanciamiento físico de las parejas generado por la pandemia COVID 19, pero intenta ser incorporado para la vida diaria ya excediendo los escenarios de cuarentena. 

MUA

Ahora bien, cabe entonces preguntarse por las formas en las que la Inteligencia Artificial tendrá incidencia en nuestras relaciones sexo afectivas y vínculos interpersonales. El cine una vez más se posicionó a la vanguardia de estas preguntas muchos años atrás y hoy vamos a hablar sobre eso.

Her es una película catalogada como ciencia ficción dirigida por Spike Jonze en el 2013. El personaje principal es interpretado por Joaquin Phoenix, el famoso actor que luego le podrá cuerpo y vida al mítico personaje Joker. El largometraje cuenta la historia de un hombre que se dedica a escribir cartas a mano a otras personas, todos los días va a la oficina y se hace pasar por diferentes remitentes que contratan a la empresa en la que trabaja para que le escriban a sus parejas, familiares y amigos/as. 

Theodore se encuentra asimilando el divorcio con su ex esposa, una mujer con la que compartió una parte importante de su vida, pero de quien termina distanciándose al punto de terminar su relación. En medio de ese proceso, compra un dispositivo de inteligencia artificial que marcará un antes y un después en su vida.

El sistema operativo brinda una asistente virtual llamada Samantha, con quien lentamente Theodore va consolidando una relación más allá del uso práctico del dispositivo y que se va trasladando al plano de lo afectivo. En paralelo, ella comienza a desarrollar características humanas muy complejas en torno a las emociones, los deseos y los pensamientos. 

En el transcurso de la película, el protagonista se encuentra sumergido en un vínculo sexo afectivo con una inteligencia artificial, y va sorteando todos los desafíos personales y sociales que esto comprende. 

Si bien esta manera de relacionarse es disruptiva, no resulta del todo fuera de lugar para el resto de los personajes. El contexto está caracterizado por un futuro en el que la tecnología atraviesa absolutamente todas las áreas de la vida, donde la gente por la calle parece que habla sola cuando en realidad gesticula porque está hablando por un auricular, y en el que las relaciones interpersonales se encuentran extremadamente debilitadas. 

El director concibió esta idea en los años 2000 inspirado en un sitio web que permitía intercambiar mensajes con una IA. En el 2010, realiza el cortometraje I’m Here sobre la relación entre dos robots. 

Trailer oficial de Her

Por otro lado, en la historia de la ciencia ficción también encontramos el capítulo Be Right Back de la serie Black Mirror. La misma fue lanzada en el año 2011 y presenta diferentes historias autoconclusivas en las que un futuro distópico hiper tecnologizado es el elemento común. 

El primer episodio de la segunda temporada de la serie sigue la vida de Martha, una mujer que pierde a su esposo Ash en un accidente automovilístico pero que casualmente hacía un uso excesivo de las redes sociales. 

En un intento de procesar el duelo, la protagonista adquiere una nueva tecnología que replica la personalidad de su pareja casi a la perfección por medio de la inteligencia artificial. De esta manera Martha se mantiene “en contacto” con su difunto esposo, al punto de desarrollar una relación con este dispositivo que cada vez aprende más a imitar con la información que él mismo había proporcionado en vida a internet y que luego ella misma le facilita. 

La representación virtual del esposo de Martha avanza a pasos agigantados con el transcurso del capítulo, llegando a situaciones extremas en las que se ve obligada a tomar decisiones respecto a cómo seguir vinculándose con el prototipo de Ash.

Casi 10 años atrás el cine nos presentaba modelos de futuros posibles sobre las formas que tendremos de vincularnos entre las personas mediados por la Inteligencia Artificial. Sin ánimos de ser una especie de predicción o brindar certeza alguna, sí sirven para invitarnos a reflexionar. 

La soledad en tiempos de hiperconectividad es un fenómeno que ya es protagonista en nuestro presente. Si las máquinas serán o no una respuesta a aquel aislamiento no lo sabemos, pero resulta fundamental seguir encontrando en lo humano un valor intrínseco para nuestra especie. 

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