La detección temprana del cáncer de mama aumenta las posibilidades de cura. Todas las mujeres entre los 50 y 69 años de edad, sin antecedentes personales ni familiares de cáncer de mama, deberían realizarse una mamografía cada uno o dos años.
Cada 19 de octubre se conmemora el Día Mundial de la Lucha contra el Cáncer de Mama, el cual busca concientizar sobre la enfermedad y dar a conocer sus diferentes síntomas y métodos preventivos, con el objetivo de difundir sobre la importancia de la prevención y el diagnóstico temprano.
¿Qué es el cáncer de mama?
El Cáncer de Mama es una alteración en las células de la mama que se multiplican y generan tumores. Según la Organización Panamericana de la Salud esta enfermedad es el cáncer más común y la causa más común de muerte por cáncer de mujeres.
Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), en 2022 se diagnosticaron 2.3 millones de casos en todo el mundo y se registraron 670.000 fallecimientos. El Cáncer de Mama fue el cáncer más común entre las mujeres de 157 de los 185 países considerados en 2022, y es prevalente en todos los países del mundo.
En Argentina, en 2022 se registraron 5.750 defunciones en mujeres por cáncer de mama, lo que corresponde a una tasa bruta de 24,4 defunciones cada 100.000 mujeres. El tratamiento del cáncer de mama detectado a tiempo puede ser eficaz. Generalmente, implica cirugía con o sin radiación y medicamentos.
La revisión manual rutinaria es un aspecto clave para el reconocimiento de la condición y el tratamiento, ya que se considera la importancia de que las mujeres que se encuentren una masa consulten a un profesional de la salud lo antes posible.
La OMS reveló que alrededor de la mitad de los casos se da en mujeres sin factor de riesgo identificable. A su vez, afirman que los exámenes preventivos del cáncer de mama pueden comenzar desde los 35 años con la ecografía mamaria, mientras que la mamografía se recomienda a partir de los 40 años.
La mamografía debe realizarse hasta los 74 años y pueden sumarse otros métodos de detección como la resonancia magnética, dirigida a personas con mayor riesgo de desarrollar la enfermedad.