Un nuevo estudio reafirma la eficacia de la vacuna bivalente ARVAC Cecilia Grierson que podría generar beneficios económicos a nuestro país.
Un estudio publicado en la revista Nature, reconocida a nivel mundial por la comunidad científica, destacó la importancia de esta vacuna bivalente 100% argentina. ARVAC Cecilia Grierson es una vacuna diseñada como refuerzo para mayores de 18 años y es un producto innovador de la ciencia argentina, que ya está patentada para venderse a otros países y generar regalías para la economía nacional.
Aprobada por la ANMAT en octubre de 2023, la vacuna fue elaborada por el trabajo del equipo científico liderado Juliana Cassataro junto a otros y otras profesionales del CONICET, la Universidad Nacional de San Martín (UNSAM) y el Laboratorio Cassará, contando con el apoyo de los entonces ministerios de Salud y de Ciencia, Tecnología e Innovación, el Desarrollo Tecnológico y la Innovación (Agencia I+D+i), sumado al trabajo de más de 20 instituciones públicas y privadas, demostrando que ambos ámbitos pueden -de manera mancomunada- llevar adelante y gestar proyectos eficientes.
Se espera que el Gobierno nacional apruebe el primer lote de dosis bivalentes (a través de la ANMAT), y de esta manera, poder distribuir las dosis en farmacias y centros vacunatorios del país. ARVAC forma parte de las vacunas de segunda generación o las llamadas “dosis de refuerzos” destinadas a personas que ya están inmunizadas, y coincide con una etapa donde la gran mayoría de la población recibió al menos una o dos dosis contra el COVID-19.
El artículo publicado en Nature, divulga hacia la comunidad científica internacional el proceso de construcción que asegura la seguridad e inmunogenicidad de la vacuna argentina, centrando como pieza fundamental la plataforma vacunal, o sea, la tecnología empleada que se basa en la proteína recombinante, y el desafío fue elegir la proteína que estimule la respuesta del sistema inmunológico.
Esta situación fue abordada por el equipo de científicos/as argentinos/as que llevó adelante ensayos preclínicos in vitro e in vivo, permitiendo identificar un primer prototipo de vacuna seguro y que a su vez, tenga capacidad para generar una respuesta inmunológica.
Otro de los puntos a favor de ARVAC Cecilia Grierson es que se puede almacenar y transportar refrigerada (2 – 8 °C), representando una ventaja destacable en términos logísticos en relación a las vacunas alternativas en base a ARN mensajero que requieren almacenarse congeladas a -70°C.
“ARVAC no posee el antígeno versión ancestral por lo cual no tiene el problema del imprinting inmunológico que las vacunas bivalentes de ARN poseen. Además, fue diseñada para que su principio activo pueda actualizarse en cuatro meses para hacer frente a nuevas variantes del virus que escapen a la respuesta inmunológica de la población. Al ser producida en el país garantiza la respuesta más veloz frente a una nueva emergencia”, expresaron desde la Universidad Nacional de San Martín en un comunicado.