El argentino Marcelo Bielsa, actualmente entrenador de la Selección Uruguaya de Fútbol, lanzó una reflexión sobre el fútbol moderno y su implicancia en sudamérica.
Marcelo Bielsa, a lo largo de su trayectoria como director técnico, se destacó por sus profundas reflexiones no solamente ligadas al fútbol sino al complejo entramado de circunstancias y actores sociales que abundan en torno a la disciplina deportiva que más alcance tiene a nivel mundial. El fútbol atraviesa fronteras y este fenómeno tiene su ascenso constante desde la irrupción de la globalización, que abarca procesos políticos, económicos, tecnológicos, sociales y culturales, por lo que el fútbol -como práctica deportiva, entretenimiento y desarrollo humano- es parte de esa expansión que no encuentra límites y alcanza lugares que hasta hace un tiempo hubiese sido impensado imaginar que nos unía un sentimiento con su población, como lo fue en el caso de Bangladesh, donde durante el mundial de Qatar 2022 las personas salían a festejar a las calles en cada triunfo del seleccionado argentino que finalmente se quedaría con el certamen.
El entrenador argentino de 68 años, guarda una extensa trayectoria en sus funciones: desde su debut con un recordado paso por Newell’s Old Boys de Rosario, su paso por el fútbol mexicano, Vélez Sarsfield, el Espanyol de Barcelona, la Selección argentina, y la revolución que causó como técnico en la Selección de Chile, el Athletic Bilbao, el Olympique de Marsella y el Lille de Francia, y su consagración con el Leeds United de Inglaterra donde logró el histórico ascenso a la Premier League.
Ahora en el presente, con el buzo de la Selección de Uruguay, Bielsa va surcando su camino donde se puede ver un cambio en lo deportivo (reflejado en los resultados obtenidos en las eliminatorias sudamericanas y en la Copa América), y donde también, Marcelo aprovecha para darle rienda suelta al punto de vista que tiene sobre diversas cuestiones ligadas con la práctica profesional del fútbol y su impacto social. En una nueva conferencia de prensa, en la previa de lo que fue el triunfo de Uruguay sobre Brasil por los cuartos de final de la Copa América Estados Unidos 2024, Bielsa no dudó en referirse a la situación del fútbol sudamericano en relación a un momento que le tocó transitar en su carrera. El disparador fue la pregunta que le hizo un periodista brasilero sobre la final de la Copa Libertadores de 1992, en la que el Newell’s dirigido por Bielsa cayó contra San Pablo, el cual contaba con grandes estrellas que poco tiempo más tarde brillaron en el fútbol europeo. El rosarino comparó lo que sucedía en ese momento con el deporte en el continente y lo que hoy en día ocurre con los clubes y las jóvenes promesas.
“Esencialmente el fútbol es propiedad popular. ¿Por qué? Porque los pobres tienen muy poca capacidad de acceso a la felicidad, porque no disponen del dinero para comprarla. Entonces, el fútbol como es gratuito es de origen popular y es una de las pocas cosas que horizontalmente los más pobres mantienen, ya no la tienen más”, afirmó Bielsa y continuó: “Si usted recuerda la formación de San Pablo que era con un entrenador monumental y una formación con todos jugadores de selección jugando en el fútbol local. Entonces fíjese lo que le pasó al pobre fútbol sudamericano. Yo tengo mala memoria, pero seguramente usted sabrá que ahí jugaban Raí, Antonio Carlos, Ronaldo, Cafú, Pintado, Evanilson, Müller y eran todos para Europa, pero antes de irse jugaron dos finales de Copa Libertadores”.
De esta forma, el entrenador argentino transmite esta inquietud por las nuevas promesas que surgen de los clubes de la región, pero antes de desplegar sus habilidades en sus ligas de origen, terminan emigrando al fútbol de élite, sirviendo como materia prima de grandes equipos europeos que superan en condiciones materiales y económicas a las instituciones de nuestro continente.
Marcelo Bielsa también aprovechó para hacerle un llamado de atención a la prensa, mencionando la poca crítica que existe hoy en día ante esta problemática que incluye a gran parte de las ligas nacionales al sur del continente. “Qué lástima que lo tenga que decir yo, porque me va a traer nada más que críticas”, comenzó y siguió: “Si hay una cosa que se debería evitar, es que los medios escuchen la voz amplificada de los que circunstancialmente tenemos repercusión pública. Yo soy escuchado porque soy DT de Uruguay, pero usted, como representante de un gremio que se atribuye un poder y que lo tiene, un poder donde se manipula hasta el máximo. ¿Por qué no asumen a través de la investigación, desenmascarar las mentiras?”.
“Cada vez que hay un episodio central significativo del fútbol, el poder difunde un montón de mentiras. Después los encargados de la difusión (los periodistas), en vez de investigar y desenmascarar las mentiras, comprometen a los hombres públicos como Scaloni, Vinicius. Los usan no para desenmascarar sino para polemizar a través de ello”, concluyó el entrenador del seleccionado uruguayo.