Científicas de la Universidad Nacional de San Luis (UNSL) trabajan en la elaboración de un enjuague bucal a base de orégano que previene la formación de caries. Si bien la investigación se encuentra en fase de laboratorio, ya se puede afirmar que esta hierba evita la formación de la bacteria streptococcus mutans, asociada al inicio y desarrollo de la caries dental.
La caries es la enfermedad dental más común en niños y niñas. En la niñez, aproximadamente 7 de cada 10 personas tienen caries. Es una enfermedad crónica infecciosa que puede prevenirse a través de hábitos y conductas saludables. Si bien al principio no molestan, a la larga pueden producir dolor y ser la puerta de entrada para otras enfermedades. Al respecto, la estudiante de la UNSL, María Alejandra Bertello, advierte: “La pérdida de una pieza dental repercute de distintas formas en la calidad de vida, desde la forma que masticamos hasta cómo nos relacionamos con otras personas. Si nos falta un diente quizás no sonreímos o evitamos hablar como lo haríamos si tuviéramos todas las piezas”.
Cómo surgió la investigación
El efecto inhibitorio que produce el orégano sobre la bacteria causante de las caries dentales surge a raíz de un estudio previo que se venía desarrollando con orégano pero sobre otra bacteria llamada Helicobacter pylori, asociada a las enfermedades gastrointestinales.
Como tenía efectos inhibitorios y actuaba sobre distintos factores de virulencia, las expertas se preguntaron qué otro patógeno de interés químico podía abordarse en este estudio. Así fue como la Dra. Andrea Celeste Arismendi Sosa propuso hacerlo con streptococcus mutans, el principal microorganismo que produce las caries.
Con el paso del tiempo, la investigación se convirtió en la base de la tesis de Bertello, quien tiene como directora del trabajo a Vega y como codirectora a Arismendi Sosa.
“Trabajamos con muestras dentales limpias y nosotras las ponemos en contacto con el microorganismo y así se forma el biofilm en la muela. No podríamos trabajar con dientes cariados porque después no habrá una reparación porque el daño ya está ocasionado”, aclararon las científicas. Además, utilizan el orégano que se consigue suelto en cualquier dietética o envasado en el supermercado.
“La idea era utilizar un orégano que la gente consuma (…) Ese producto fue identificado científicamente como orégano para evitar que haya una mezcla en los compuestos que uno compra”, explicaron las investigadoras.
El proceso
El proceso consta de la realización de un extracto líquido de una concentración de 10 gramos de orégano con agua hervida y lo dejan reposar 20 minutos. Posteriormente, filtran el líquido para trabajarlo en condiciones estériles. Después, realizan un procedimiento químico para pasarlo a estado sólido y lograr un polvo de extracto de orégano, el cual utilizan para los estudios.
“Se hacen pruebas, se determina la concentración inhibitoria mínima y después, una vez establecida esa concentración, la trabajamos para poder hacer esos ensayos, por ejemplo, de inhibición del biofilm”, explicó Arismendi Sosa.
A nivel comercial no existe ningún enjuague o pasta dental que tenga en su composición algún derivado del orégano. Esto vendría a ser un producto inédito para el mercado. “Estamos en la etapa de probar esta formulación del enjuague”, concluyó Bertello.
