La OMS reconoce a una joven argentina por su labor para el control del tabaco

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La joven abogada Gianella Severini fue reconocida por su trabajo en una entidad internacional que se dedica a la lucha contra el tabaquismo.

Una abogada argentina recibirá este año un reconocimiento por parte de la Organización Mundial de la Salud (OMS) en el cual se le reconocen sus logros para controlar el avance del tabaquismo. Su nombre es Gianella Severini, es oriunda de Neuquén, tiene 32 años y recibirá el galardón en la sede argentina de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) en la previa del Día Mundial sin Tabaco (31 de mayo). 

Según la condecoración especial emitida por la OMS, resaltan de Gianella “su labor desde la coordinación legal de Campaign for Tobacco-Free Kids (CTFK), donde se ha destacado como una mujer líder prominente en América Latina convirtiéndose en una de las personas más influyentes en cuestiones legales, relacionadas con el control del tabaco en la Argentina, Brasil, Costa Rica, Chile, México, Perú, Uruguay y otros países. Su asesoramiento estratégico sobre legislación y litigios ha sido crucial para defender las leyes y resistir la interferencia de la industria tabacalera en varios países”. 

La Organización Mundial de la Salud, año tras año, honra a personas y organizaciones excepcionales en sus seis regiones por sus destacadas contribuciones al control del tabaco a través de los prestigiosos Premios del Día Mundial Sin Tabaco. Severini será una de las personas más jóvenes en recibir la medalla concedida por Tedros Adhanom Ghebreyesus, mientras que, personalidades como el expresidente uruguayo, Tabaré Vázquez, el Instituto de Efectividad Clínica y Sanitaria (IECS) y FIC Argentina, ya recibieron esta distinción.

La joven se graduó como abogada en la Universidad Nacional de Córdoba y realizó una extensión universitaria en la Universidad de París. También es periodista por TEA y Deportea. Obtuvo un Magíster en Derecho a la Salud Global por la Universidad de Georgetown, con una especialización en Derechos Humanos y Comercio Internacional.

“A nivel nacional se prohíben campañas de tabaco en televisión, pero no en los entornos digitales. Por eso redes sociales e influencers, que son los que más llegada tienen al público joven, publicitan sin tener restricciones, y allí es donde hay que apuntar. Hace rato se está pidiendo, por caso, que se prohíba publicitar en forma completa, y esto es algo que aún no se logró”, dice Gianella en nota con Río Negro Radio, y agrega: “Los cigarrillos electrónicos son adictivos porque tienen nicotina, y lo que sale al vapear también es contaminante. Pero existe la falsa idea de que no causan daño. Además se desconoce que, como ocurre con el cigarrillo común, tampoco se pueden usar vapeadores en espacios cerrados, o en los mismos ámbitos en los que se prohíbe el tabaco convencional”.

La ONG que integra Gianella tiene entre sus ejes, el de trabajar para imponer más regulaciones sobre los nuevos productos que promueven las tabacaleras, como los cigarrillos electrónicos o el tabaco calentado, que también son nocivos para la salud más allá de que se planteen como una alternativa menos dañina.

La prevalencia de consumo de cigarrillos sigue siendo alta en la Argentina con respecto de otros países. Con los nuevos productos emergentes (cigarrillo electrónico, tabaco calentado, bolsitas de nicotina o pouches) que se están comercializando con el argumento de que son menos dañinos o con una falsa estrategia de reducción de daños se cae en la contradicción de que la propia industria que generó el problema de salud pública nos quiere hacer creer que, ahora, trae la solución”, concluye Severini.

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