La Corte Suprema ordenó a la provincia de Catamarca la suspensión total de la actividad en el Salar del Hombre Muerto. Además, paralizó toda actividad minera hasta que se haga un estudio de impacto ambiental.
En un fallo histórico contra la minería de litio, el Máximo Tribunal de la provincia de Catamarca ordenó la suspensión total de la actividad en una mina de litio conocida como Salar del Hombre Muerto. Al mismo tiempo determinó que se ponga en marcha un nuevo estudio de impacto ambiental de la actividad extractiva, luego de que una comunidad originaria promovió una acción de amparo al constatarse que la actividad minera perjudicó las condiciones esenciales de un río.
La sentencia establece que el Ministerio de Minería, Agua, Energía y Medioambiente de la provincia no otorgará nuevos permisos ni permitirá ningún tipo de actividad relacionada a la minería hasta que se haga un nuevo estudio ambiental que contenga la información sobre los impactos acumulativos e integrales de la actividad que extrae agua del río Los Patos.
La Corte provincial señaló que todo proyecto debe cumplir con la consulta previa, libre e informada a las comunidades originarias, marcando un antecedente clave que no solo contempla la cuestión ambiental sino también los derechos de estas comunidades en defensa de la tierra y sus condiciones vitales.
“Todos los proyectos mineros, en sus diferentes etapas, inciden sobre la misma zona, y no se advierten acciones tendientes al estudio de impacto ambiental de forma integral y acumulativa, como lo exige a modo de presupuesto mínimo la materia ambiental, a fin de poder conocer la situación real y potencialmente riesgosas o dañina”, dice el fallo.
Los protagonistas claves de este proceso fueron la Comunidad Indígena Atacameños del Altiplano y el río Los Patos. En 2019, vecinos y vecinas de Antofagasta de la Sierra son alertados sobre el proyecto de la empresa Livent que buscaba construir un acueducto para extraer agua de ese río, que es donde cursa el mayor caudal de la zona.
La empresa necesitaba de una nueva represa ya que en los últimos años había secado por completo la vega y el río Trapiche, generando un daño ambiental considerable y gravoso. Ya en 2020, la Asamblea Ambiental PUCARÁ (Pueblos Catamarqueños en Resistencia y Autodeterminación), acompañó a la comunidad de cacique Román Guitián en el primer pedido de suspensión de permisos para extraer agua del río Los Patos, presentado ante el Juzgado de Minas y el Ministerio de Minería.
El inicio de la causa judicial se dio en 2021, donde se demostró el daño ambiental producido por la actividad minera y la alteración del ecosistema de la zona. En esta instancia también se evidenció la persecución social y la violación a derechos de las comunidades indígenas.
Finalmente, en 2024 la lucha de esta comunidad tuvo sus frutos y se obtuvo esta histórica resolución de la Corte. “Luchamos para que se demuestre que si más de una decena de proyectos mineros extraen agua del río Los Patos, van a matar todo el humedal al que le da vida este río. Queremos que se sepa de una vez que la empresa LIVENT secó por completo la vega del río Trapiche para la explotación de litio, y hoy la misma empresa junto a 7 proyectos más está extrayendo agua del río Los Patos, luchamos para exponer el manejo corrupto que tienen el gobierno con las empresas a la hora de entregar los territorios al extractivismo”, expresaron desde sus redes sociales la Asamblea PUCARÁ y la Alianza de Humedales Andinos.
De ahora en más, tanto el Gobierno provincial como las empresas involucradas tendrán la obligación de trabajar en los estudios de impacto ambiental que establezcan si la actividad puede o no continuar su desarrollo.
