ILGA Mundo y The Engine Room son dos entidades que decidieron preguntarse (y responder) la pregunta sobre qué sucede con la brecha digital y la comunidad LGBTIQ+. Sobre eso trata “Acceder a la conexión: cerrando la brecha digital de las comunidades LGBTI en el mundo” el informe que busca brindar algunas certezas.
“En una era definida por una interconectividad digital sin precedentes, el acceso a la información y la inclusión digital se presentan como elementos esenciales para la búsqueda de comunidad, la defensa de derechos y la participación plena en sociedad” cuentan las autoras en la introducción.
“Pese a ello, la conectividad significativa para todes es algo todavía muy lejano. A la fecha, se estima que hay 2.600 millones de personas sin acceso a internet. Para muches de los dos tercios de la población mundial restante, la posibilidad de acceder a recursos digitales depende de la capacidad de superar los obstáculos emergentes de la interseccionalidad de sus identidades” agregan como diagnóstico.
En este marco, la investigación busca pensar el escenario complejo que comprende la disparidad en el acceso digital y la realidad específica de las personas que no entran dentro de los patrones hetero-cis género.
El informe
Uno de los principales objetivos fue el de identificar aquellas barreras concretas que impiden o dificultan el acceso para la comunidad. Entre ellos se encuentran:
➜ Acceso a la tecnología y a la conectividad a internet (incluye aquellas barreras vinculadas a la brecha urbano-rural, género y asequibilidad)
➜ Accesibilidad (inclusión de personas con discapacidad), acceso digital y alfabetización digital
➜ Discriminación y acoso en línea
➜ Barreras legales y políticas
A su vez, plantea líneas de acción para modificar esta situación:
➜ Aumentar la cooperación entre movimientos y fronteras
➜ La educación y concientización son necesarias para mejorar las experiencias virtuales
➜ Las reformas legales son clave en el abordaje de la brecha digital de las personas LGBTIQ+
➜ Reforzar el acceso a internet requiere de mayor apoyo y financiamiento
También realiza comentarios sobre las realidades particulares de cada región que se suman a las mencionadas. Sobre Latinoamérica y el Caribe se expresa:
“El factor precio es el principal determinante de la brecha de uso de internet en el caso de aquellas personas que tienen conectividad en la zona. Si bien los precios del servicio han disminuido en los últimos años, la desigualdad de ingresos, sumada a los impuestos asociados al servicio de internet (sobre todo en Ecuador y Argentina), hacen que muchas personas no puedan afrontarlos. La baja calidad del servicio, los apagones eléctricos y los elevados cargos por servicio son obstáculos adicionales que se suman al nivel de frustración que genera el factor precio”.
Además, “La falta de infraestructura de red repercute muy especialmente en las personas LGBTI, muchas de las cuales también se ven marginadas por su raza, condición de pertenencia a la población indígena y/o género”.
Si querés leer el informe completo ingresá acá.
