A 36 años de la masacre de Budge: un programa en contra de la violencia institucional

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La violencia institucional es el uso arbitrario, ilegítimo o abusivo del monopolio de la fuerza, ejercido por agentes o funcionarios/as del Estado. La misma comprende prácticas físicas, psíquicas, sexuales o simbólicas. 
Hoy, 8 de mayo, se conmemora el Día de la Lucha Contra la Violencia Institucional y la Secretaría de Derechos Humanos lanza un nuevo programa de formación para las fuerzas de seguridad

El programa

El nuevo programa tiene como objetivo prevenir, sancionar y reparar las violaciones a los derechos humanos llevadas adelante por fuerzas federales y provinciales, con la intención de reducir hasta eliminar estas acciones en nuestro país. 

Lo hará mediante una serie de formaciones a agentes de las fuerzas de seguridad y servicios penitenciarios y, por otro lado, garantizará asistencia técnica a los gobiernos nacionales y provinciales para políticas de prevención. Además, la iniciativa está destinada no sólo a la formación permanente del personal que ya se encuentra contratado sino también formará parte de los procesos de capacitación a ingresantes de la fuerza y penales. 

¿Qué fue la masacre de Ingeniero Budge?

La masacre de Ingeniero Budge fue el asesinato de tres jóvenes de la localidad del partido de Lomas de Zamora en manos de suboficiales de la Policía Bonaerense en el año 1987.

Oscar Aredes de 19 años, Roberto “Willy” Argañaraz de 24 y Agustín Olivera de 26 se encontraban en la esquina de Guaminí y Figueredo, de Ingeniero Budge, cuando fueron asesinados por tres policías bonaerenses. 

Los jóvenes tomaban cerveza y conversaban cuando fueron atacados brutalmente por los policías. Supuestamente, los dos mayores habían tenido problemas con la dueña del lugar donde compraron la bebida, motivo por el cual los efectivos habían ido en su búsqueda. Sin embargo, las heridas de las víctimas fueron múltiples, mayormente con heridas de bala por la espalda e impactos en la cabeza a corta distancia. Esto por supuesto dista ampliamente de los protocolos policiales para dicha situación. 

El caso es conocido como uno de los primeros de “gatillo fácil” desde el regreso de la democracia en 1983 y contó con una serie de movilizaciones barriales y denuncias públicas por parte de la sociedad civil, además de su reflejo en los medios de comunicación. 

Desde 2013 rige la ley 26.811 en la que se declaró el Día de la Lucha Contra de la Violencia Institucional en conmemoración a estos trágicos sucesos y con el objetivo de visibilizar los profundos sesgos autoritarios que existen en las fuerzas de seguridad

Información útil

La Secretaría de Derechos Humanos realizó una serie de indicaciones y recomendaciones en torno a la violencia policial: 
Requisas: por lo general, la policía no puede revisar tus cosas. Solo podrá requisarte a vos, tu mochila o tu auto cuando circunstancias previas hicieran suponer que participaste o estás participando en la comisión de un delito. Esta sospecha tiene que estar basada en hechos objetivos y no subjetivos, como pueden ser la vestimenta o el lugar donde vivís. En caso de que corresponda la requisa, tenés derecho a pedir dos testigos.
Sólo puede revisarte personal de tu mismo género.
Sí tenés menos de 18 años no podés ser detenido por “averiguación de identidad”. No te pueden esposar ni llevar en un auto que no se identifique como policial. No pueden encerrarte en un calabozo ni tenerte junto a mayores de edad ni quitarte tus pertenencias ni tomarte las huellas digitales. La intervención del juzgado de menores tiene que ser inmediata. Siempre tenés derecho a hacer una llamada telefónica.
Si tenés menos de 16 años, deben entregarte a tus padres o tutores luego de realizarte los chequeos médicos de rutina.
Si te encontrás en estado de ebriedad o bajo los efectos de estupefacientes y no cometiste ningún delito, la policía no puede detenerte, pero sí puede intervenir para que recibas asistencia en salud.
Las detenciones son algo excepcional. Todos tenemos derecho a transitar libremente, ninguna persona puede ser detenida por su aspecto, vestimenta o lugar donde vive
Te pueden detener si existe una orden judicial escrita, si estás intentando cometer un delito, lo estás cometiendo o si estás escapando luego de haberlo realizado.
Recordá siempre llevar tu DNI. Si bien no existe obligación legal, es mejor llevarlo con vos siempre que salís de casa.
En caso de ser testigo de un hecho de abuso policial, acércate y grabá con tu celular, nadie te puede impedir que lo hagas. Sin embargo, si la policía te obliga a dejar de hacerlo, apagá el celular para no ser detenido/a.

Ante abusos policiales de cualquier tipo podés denunciar al 0800 122 5878, por WhatsApp al 11 4091-7352 o vía mail a denuncias@jus.gob.ar

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